RUSIA PROHÍBE EL CAMBIO DE SEXO, LA LEY PROHÍBE CUALQUIER TIPO DE INTERVENCIÓN QUIRÚRGICA O FARMACOLÓGICA PARA MODIFICAR EL SEXO BIOLÓGICO
El presidente ruso, Vladímir Putin, ha firmado una ley que impide el cambio de sexo por cualquier medio, tanto médico como legal, en Rusia. La ley, supone una grave violación de los derechos humanos y de la identidad de género de las personas transgénero, que se ven privadas de su libertad y reconocimiento.
La ley prohíbe cualquier tipo de intervención quirúrgica o farmacológica para modificar el sexo biológico de una persona, salvo en casos de anomalías congénitas o enfermedades genéticas que afecten a los órganos genitales. También impide el cambio de género en los documentos oficiales, basado en certificados médicos que indiquen una transición de género.
Además, la ley establece que las personas que hayan cambiado de sexo no podrán adoptar niños, ni ser sus tutores o fideicomisarios. Tampoco podrán contraer matrimonio con personas del mismo sexo biológico, ya que la Constitución rusa solo reconoce la unión entre un hombre y una mujer. La ley también anula los matrimonios existentes entre personas transgénero, así como el cambio de género en los documentos oficiales. Según datos oficiales, entre 2018 y 2020 más de 2 mil 700 rusos cambiaron de sexo en sus documentos, lo que dio lugar a casi 200 matrimonios.
En Rusia los defensores de la ley argumentan que se trata de una medida para proteger a los niños y a los adultos de una “degeneración” social y moral
Sin embargo, los detractores denuncian que se trata de una discriminación injustificada y cruel, que atenta contra la dignidad y la salud de las personas transgénero.
“Como primera política transexual de Rusia puedo decir que esta ley no solo es discriminadora, sino que prohíbe la propia existencia de la gente trans en Rusia. Es un genocidio contra los transexuales”, declaró a EFE Yulia Alióshina, candidata a gobernador por la región siberiana de Altái.
Maxim, un transexual que trabaja con el Centro T, la principal organización de ayuda a los trans en Rusia, confesó que tiene planes de emigrar a España. “Rusia se está degradando a marchas forzadas. Los que pensaban operarse, tendrán que hacer lo mismo”, dijo.
La ley se suma a otras restricciones legales y sociales que afectan a las minorías sexuales en Rusia, como la prohibición de la propaganda homosexual entre menores o la persecución de activistas LGBT. Según el informe anual del Observatorio para los Derechos Humanos LGBT, en 2020 se registraron al menos 18 casos de violencia física contra personas LGBT en Rusia, así como 11 casos de amenazas y extorsión.
La ley también contradice las recomendaciones del Consejo de Europa, que insta a los Estados miembros a garantizar el derecho al cambio legal de género sin requisitos médicos ni esterilización forzada. Asimismo, viola el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, del que Rusia es parte, que reconoce el derecho a la autodeterminación sexual y a la no discriminación por motivos de orientación sexual o identidad de género.
La comunidad internacional ha expresado su preocupación y rechazo por esta ley, que supone un retroceso en el respeto a los derechos humanos y a la diversidad. Organizaciones como Amnistía Internacional, Human Rights Watch o ILGA-Europa han pedido al gobierno ruso que revoque esta ley y garantice la protección y el reconocimiento legal de las personas transgénero.