TORTURADOR DE LYDIA CACHO, EXDIRECTOR DE LA POLICÍA DE PUEBLA RECIBE AUTO DE FORMAL PRISIÓN

Hugo Adolfo K. B., exdirector de la Policía estatal de Puebla, es procesado por el delito de tortura en contra de la periodista y defensora de derechos humanos Lydia Cacho, quien en 2005 reveló la existencia de una red de explotación sexual de niñas y niños que involucraba a empresarios y políticos poderosos.

La jueza federal María Elena Suárez dictó el auto de formal prisión contra el exfuncionario, quien se encuentra en prisión preventiva desde el pasado 14 de julio, cuando fue detenido por agentes de la Fiscalía General de la República (FGR).

La FGR aportó evidencia suficiente para probar la existencia de un aparato organizado de poder dentro de la estructura del gobierno del estado de Puebla, que planeó y ejecutó un plan sistematizado para castigar a una periodista”, indicó la institución en un comunicado.

De acuerdo con la acusación, Hugo Adolfo K. B. organizó la ejecución de la orden de aprehensión contra Lydia Cacho, quien fue detenida en Cancún, Quintana Roo, y trasladada por carretera a Puebla, donde fue sometida a actos de tortura física y psicológica.

La FGR recordó que por el caso existen tres sentencias condenatorias por tortura, contra exfuncionarios de las antiguas procuradurías generales de Justicia de Puebla y Quintana Roo

Asimismo, dos personas más se encuentran en prisión preventiva justificada durante el desarrollo de su proceso, se trata del exgobernador poblano Mario Marín, quien fue detenido en Acapulco, Guerrero, y del empresario Kamel Nacif, quien fue capturado en Líbano. Ambos fueron señalados por Lydia Cacho como responsables de la red de trata infantil que destapó en su libro “Los demonios del Edén”.

El caso ha sido reconocido por el Comité de Derechos Humanos de las Naciones Unidas como una violación grave a los derechos humanos de la periodista por parte del Estado mexicano. La ONU ha instado a las autoridades a garantizar una investigación efectiva y a no permitir la impunidad frente a los abusos contra Lydia Cacho.